Transcurría el minuto 43 de la primera mitad cuando un choque fortuito entre Víctor Silvano y un delantero rival (cerca de la grada de aficionados) provocó la segunda tarjeta amarilla del jugador local. Mientras el árbitro anotaba lo ocurrido un aficionado de avanzada edad se subió a la valla que separa el césped de la grada y agarró al señor colegiado don Andrés Aguiló Afanador por el cuello de la camiseta y lo sujetó varios segundos. El árbitro decidió suspender el partido hasta que llegara la guardia civil que no fue hasta unos 20 - 25 minutos.
Una vez se reanudó el juego, se jugaron dos minutos más el descuento de la primera parte para volver de nuevo a los vestuarios para después empezar la segunda mitad.
Al inicio de la segunda mitad el Pla se quedó con 9 jugadores ya que uno de sus centrales agarró a Ñoño que ya se disponía a encarar al portero; la última expulsión fue en los minutos finales y ya intrascendente.
Como decimos, partido extraño por todo lo vivido y esperamos no volver a ver estas acciones en ningún campo de fútbol. Los árbitros forman parte de nuestro deporte y tendríamos que entender que su labor es tan complicada como imprescindible para que se pueda disputar un partido.